HISTORIA

HISTORIA DE LAS LOTERIAS

Las loterías consisten en un sorteo que se realiza sobre un grupo de números predeterminados, y sus antecedentes históricos se remontan hasta la época del Imperio Romano, aunque también hay referencias en la Dinastía Hun de China (unos 100 años antes de Cristo).
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En general, siempre se han creado este tipo de sorteos de forma oficial con la finalidad de recaudar fondos destinados a financiar gastos del Estado, por lo que una parte del dinero recaudado por su venta se destina a los premios y el resto a las cuentas públicas..
Loterías antiguas
. La primera denominación actual, "lotería", la encontramos en Génova (Italia) en 1515 con el nombre de "lotto", aunque utilizando un sorteo de nombres en lugar de números. Florencia (Italia) le daría la configuración con cifras en 1530 y desde entonces todos los países han ido poniendo en marcha sus sorteos oficiales: Francia (1539), Inglaterra (1567), las colonias británicas de América (1612), España (1763), las colonias españolas de América (1771) ...
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En sus orígenes el sistema de sorteo era muy variado (el de Génova en 1515 utilizaba nombres, Francia en 1759 permitía elegir cinco cifras entre el 1 y el 90, etc.) aunque la mayoría consistía en la venta de unos cupones con números previamente definidos. Actualmente existen tres tipos de lotería, aunque no todos están vigentes en cada país:
- Billetes o boletos de lotería, con números previamente impresos y cuyo premio se adjudica mediante un sorteo.
- Lotería instantánea, que consiste en un premio que esta oculto bajo una capa de tinta y al raspar la misma queda al descubierto.
- Lotería de números, en la que hay que elegir varios números entre un intervalo determinado.
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El coleccionismo se concentra básicamente en los dos primeros tipos. En el caso de los boletos combinando dos formas diferentes, una en función de los números y la relación de éstos entre sí (buscando capicúas, cifras repetidas, consecutivos, etc.) y otra en base a las imágenes representadas. Sin olvidar, por supuesto, el coleccionismo de ediciones antiguas o las famosas "pruebas de impresión".
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Por su parte, la lotería instantánea tiene una versión particularmente cara, que consiste en la colección de billetes de lotería no usados. Es decir, comprados directamente a los distribuidores de lotería a su precio normal y a los que nunca se les ha "raspado" la tapa que oculta el premio.